Guía práctica para saber cómo cuidar un bonsai

Con esta guía básica podrás saber cómo cuidar un bonsai de manera adecuada para disfrutar de esta práctica china de antaño y embellecer tus espacios.

Cómo cuidar un bonsai: orígenes de una práctica milenaria

Antes de contarte cómo cuidar un bonsai es importante conocer sus orígenes: estas pequeñas plantas se originaron hace más de 2000 años en la China imperial, representando paisajes a escalas disminuidas.

Sin embargo, fueron los japoneses quienes comenzaron a cultivar estos árboles de manera individual y en maceteros pequeños hace al menos 700 años. De allí que el nombre bonsai significa “plantado en macetero”.

Ahora bien, el concepto va más allá de las plantas naturales, pues además refiere a toda la disciplina artística que les da vida y que implica la recreación miniaturizada de un árbol mediante técnicas y prácticas concretas como la poda y eliminación de ciertos brotes, el calendario de abono para fertilizar la tierra, entre otras.

Cualquier arbusto puede convertirse en bonsai. Aquellos que poseen hojas pequeñas permiten que el proceso de transformación sea más fácil, aunque la mayor parte de las plantas pueden lograrlo, teniendo en cuenta sus condiciones ambientales habituales.

Hoy, muchas viviendas optan por adornar con un bonsai cual si fuera una obra de arte. Se trata de una opción ideal para el interior o exterior del hogar, aunque requiere de algunos cuidados extremos, que veremos en el siguiente apartado. 

¿Consejos sobre cómo cuidar un bonsai?

Para cuidar un bonsai debes considerar aspectos clave que ayudan a mantener esta planta en perfecto estado. A continuación los enumeramos.

• Ubicación. El primer punto es saber dónde estará situado el bonsai: ¿en tu dormitorio? ¿La cocina? ¿El living? Esto es importante ya que la exposición al sol es clave, dado que cada planta requiere de diferentes horas de sol para crecer y mantenerse vigorosa. La regla general es que se sitúe a pleno sol durante las primeras horas del día y esté resguardado de ráfagas de viento.
• Riego. Un punto importante es la cantidad de agua que proporcionarás a tu pequeño arbusto: riégalo teniendo en cuenta el estado de la tierra, considerando que ésta no debe verse demasiado seca ni humedecida cuando lo hagas. Recuerda que mucha agua puede pudrir las raíces, muy sensibles en estas plantas. Lo recomendable es que introduzcas un dedo en la tierra para evaluar la humedad.

• Abono. Los nutrientes de los que dispone un bonsai son acotados debido a la poca cantidad de tierra, por esto es importante un abono adecuado. El mercado ofrece alternativas de humus completos para estas plantas.
• Poda. La poda es la que brinda el estilo característico de estos pequeños árboles y que suele realizarse en sus momentos de inactividad: cuando caen sus hojas hasta antes de producirse la brotación. Más allá de esta generalidad, lo recomendado por los expertos es que la poda se lleve a cabo al finalizar el invierno. El corte de las ramas se realiza de manera inclinada y mirando hacia arriba con la finalidad de potenciar la cicatrización y evitando siempre el corte perpendicular. 
• Pinzado. Esta acción es la encargada de dar forma al bonsai; para lograrlo se cortan los crecimientos longitudinales que suelen romper el perfil de la copa del arbusto, promoviendo que el crecimiento de la planta se distribuya de forma equilibrada.

Ahora que conoces todo sobre cómo cuidar un bonsai, ten en cuenta esta planta para embellecer los espacios de tu hogar y hacer que luzca una personalidad única repleta de arte milenario.