¿Cómo es el cuidado de gatos recién nacidos?

Los cuidados de gatos bebes son fundamentales para su sano crecimiento y desarrollo. Aunque en la vida adulta serán animales completamente autónomos e independientes, durante los primeros meses de vida necesitan atención constante.

Como cuidadores debemos comprender desde sus comportamientos en cada etapa, hasta los accesorios que necesitan en su día a día, la alimentación, la atención veterinaria y el descanso, entre muchos aspectos más. A continuación te daremos algunos consejos básicos para el cuidado de gatos recién nacidos. 

Cuidado de gatos recién nacidos: tips que salvan vidas

• Accesorios y su entorno 

La base es brindarle al o los recién nacidos las mejores condiciones para los primeros días de vida, ya que de su entorno dependerá su rápida evolución y adaptación al mundo exterior. El primer paso es hacer una check list de los accesorios que no pueden faltarle:

• Comedero y bebedero: alejado uno del otro a una distancia prudente para que el gatito no sienta invasión de su espacio de alimentación. Si hay más de un bebé, deberás disponer de varios distribuidos en distintos puntos de la casa. En lo posible utiliza recipientes de acero inoxidable y recambia el agua regularmente. .
• Arenero: según la cantidad de gatos que tengas, quizás debas poner más de uno y también alejados de la zona de alimentación. La limpieza es fundamental, deberás hacerlo al menos dos veces a la semana.
• Juegos o rascadores: debes acostumbrar al cachorro desde pequeño para que no afilen sus garras en los muebles. Existen varios tipos de rascadores, algunos en formato tabla y otros verticales. Suelen entretenerse mucho en ellos. 
• Área de descanso: es clave que tengan una cama donde descansar. Debe estar ubicada en una zona tranquila, sin ruidos y en lo posible con una temperatura ambiente agradable. Uno de los principales cuidados de los gatos bebés es ofrecerle una buena calidad de sueño, sin interrupciones. Esto es esencial para su desarrollo físico y mental, además de su conducta y aprendizaje.
• Nido: el nido es un refugio que el gato usará cada vez que sienta miedo. Esta protección la puede otorgar una cama tipo nido ubicada en una zona calma y alta de la casa, donde el gato puede esconderse cuando lo necesite. Ten en cuenta que cada vez que vaya a su nido, no hay que molestarlo. Por eso esta zona es de gran importancia al momento de cuidar a un gato. 

• Alimentación del gato bebé

Lo primero que debes saber es que el cachorro necesita a su mamá los primeros meses, ya que ella cumple un rol irremplazable en esta etapa. La leche materna, además de alimentarlo, le proporciona lo que se conoce como calostro, el cual contiene inmunoglobulinas que protegen su organismo. 

Si por algún motivo, tu gato ya no está en compañía de su madre, lo primero que deberás hacer es llevarlo al médico veterinario para que te brinden leche maternizada artificial, que será entonces la base de su alimentación. Luego de los dos meses de esta leche, se puede comenzar con una alimentación más sólida, incorporando progresivamente raciones de patés, siempre que estén formulados para gatos cachorros. Más adelante se podrá incluir pienso humedecido en agua, siempre bajo el control y la indicación del profesional veterinario. 

A partir de los 3 meses de edad es el momento indicado para el total destete de su madre, ya que para entonces ya está completamente inmunizado, puede comer comida 100% sólida y aprendió conductas de comportamiento que son claves para su supervivencia: el aseo, la micción en el arenero, la comunicación, etc. 

• Rutinas básicas para el cuidado de un gato 

Una vez superado el primer trimestre, tu gato continúa siendo bebé pero ya sus cuidados son similares a los de un felino adulto. Deberás incorporar estas rutinas básicas: 

Cepillar al gato regularmente para controlar la caída del cabello y además detectar a tiempo cualquier problema de salud en la piel, como parásitos. Además es un gesto de cariño hacia el animal, que lo relaja mucho. 

Para prevenir problemas de conducta, será clave estimular su inteligencia emocional a través de juegos como las estructuras para gatos, estímulos visuales y olfativos o incluso una simple caja que lo anima a explorar. 

La estimulación física también es importante y debe formar parte de tu rutina de cuidados diaria. El gato debe mantenerse en forma y realizar actividad física para desarrollar su musculatura y evitar el sobrepeso. Los túneles son un excelente juego para ayudarlo a mantenerse activo. Eso sí, ofrece recompensas luego del ejercicio, con una buena siesta o un momento de relax en una cama confortable. 

Por último pero no menos importante, más allá de todas las prácticas cotidianas para cuidar a un gato cachorro, hay una receta que nunca falla: el amor. El pleno desarrollo de nuestras mascotas solo se consigue cuando hay cariño, dedicación y muchos muchos mimos.